cospeito |
GUÍA TURÍSTICA
QUÉ VISITAR
|
TORRE DE CALDALOBA
A Rabadá 27377 Cospeito - Lugo Torre de 25 m. de altura, emplazada en el antiguo coto de Mato aprovechando el emplazamiento defensivo de un antiguo castro, con 4 fosos. Solo se conserva la torre del homenaje del antiguo castillo. Fue propiedad del Mariscal Pardo de Cela, y lugar donde su hija Constanza de Castro se reveló en 1483 contra los enviados de los Reyes Católicos, como venganza a la decapitación de su padre en Mondoñedo. Las revueltas irmandiñas y el paso del tiempo ocasionaron su actual estado ruinoso, pues queda abandonada desde el s. XV, aunque actualmente sus ruínas están consolidadas.
|
|
LAGUNA DE COSPEITO
Cospeito - Lugo En torno a las lagunas y humedales se pueden realizar rutas de senderismo a pie o en bicicleta. Desde la Feria do Monte podemos rodear la laguna y observar desde el mirador las planicies colonizadas y disfrutar tanto de un observatorio de aves, como de la posibilidad de admirar su vegetación y fauna característica. Brezos, juncales y diversas comunidades de vegetación acuática proporcionan refugio a tritones, sapillos pintojos, ranas de San Antón, ánades, cercetas y zampullines entre otras especies.
|
|
PAZO DE SISTALLO
O Palacio 27377 Cospeito - Lugo El pazo fue construido por el arquitecto Salero Meizo, por encargo de Fernando Verdes de Montenegro, hijo del caballero irlandés O´Shea. Su fisonomía, de gruesos muros, estructura rectangular con dos plantas, denota un cierto aire irlandés. En la finca, con jardines y con especies de plantas de todas las partes del mundo, encontramos una hermosa fuente de granito sobre la que destaca una figura de madrona sosteniendo una leyenda. Propiedad privada no visitable.
|
SITUACIÓN
El municipio de Cospeito está situado en la comarca de Terra Chá y limita al norte con Vilalba, Abadín y A Pastoriza, al sur con Outeiro de Rei, al este con Castro de Rei y al oeste con Begonte y Vilalba. Tiene una superficie de 145 km2 dividida en 20 parroquias.
CÓMO LLEGAR
El municipio de Cospeito está situado en la comarca de Terra Chá y limita al norte con Vilalba, Abadín y A Pastoriza, al sur con Outeiro de Rei, al este con Castro de Rei y al oeste con Begonte y Vilalba. Tiene una superficie de 145 km2 dividida en 20 parroquias.
CÓMO LLEGAR
Para llegar a Cospeito desde Lugo deberemos seguir la LU-111 para incorporarnos a la A-6, la cual recorreremos durante aproximadamente 9 km. Luego tomaremos la salida 500 hacia N-VI/Lugo Centro cidade/N-540/Ourense.
Existen autobuses diarios que comunican Cospeito con la ciudad de Lugo, situada a 31 km de municipio. |
HISTORIA
Los orígenes de Cospeito están ligados tanto a datos de la época prehistórica como a numerosos testigos legados por la tradición. Según ésta, en el emplazamiento designado con el nombre de Vería o Nabalverde tuvieron su asentamiento pobladores de palafitos o ciudades lacustres, que desaparecieron, allá en la remota edad, inundados bajo las aguas. Se trataría de la Laguna de Cospeito o Nabalverde. Boán y el padre Gándara, entre otros, confirmarían posteriormente la existencia bajo las aguas de esta laguna de restos de tejas y ladrillos, hierros y otros materiales, dato que viene a confirmar su ubicación en A Lama de Sta. Cristina, de una población lacustre. Entorno a este hecho se conservan aún entre las gentes del municipio diferentes versiones de una misma leyenda, que tiene a la Virgen María como protagonista. Como recuerdo de la inundación y testigo del mismo, conta la tradición que la Virgen ordenó levantar una capilla en su honra en el lugar próximo de O Monte, donde hoy se alza el templo de Sta. María de Feira do Monte, en la capital del término. Según cuentan algunos historiadores, en tiempos de Íberos y Celtas, el río Támoga, que atraviesa el Municipio en dirección N-S y que dio su nombre a una de las parroquias que riega, constituyó uno de los sagrados ríos céltigos. El Tameobrigo, que al decir de Murguía, recibió las libaciones de sus ribereños y merecía las ofrendas y las víctimas de estos. El padre Sarmiento, por otro lado, habla de Salaniana, mansión del Imperio Romano, situada en el itinerario de Braga a Astorga, como correspondiente a la actual Muimenta.
En la Edad Media, el coto de A Pena de Cospeito perteneció a Ruy López de Aguiar ( López de A Pena ), osado caballero gallego y sonado trobador de producción desconocida, que llegó a apoderarse del alcázar de Lugo (1461) y a tener 30 jinetes armados bajo sus órdenes. Las restantes tierras del municipio, a lo largo del período histórico considerado, fueron pertenencia casi por entero a los Andrade: solo en la actual feligresía de Santalla de Rioaveso contaban con más de 60 vasallos.
En el siglo XV durante el levantamiento popular de los Irmandiños contra la opresión señorial, las gentes de Cospeito dejaron testigo de su participación en la lucha: La Torre de Támoga, por ejemplo, o su histórico Castillo de Caldaloba o Vilaxoán, conservaron huellas de la destrucción de los insurrectos. En esta última fortaleza una vez restaurada, resistieron Constanza y Fernán Ares de Saavedra, hija y yerno respectivamente del ajusticiado Pardo de Cela. Se trataba del último reducto de la nobleza gallega que opuso resistencia a la uniformadora política de Castilla.
Las tierras del municipio se dividieron posteriormente en cotos y jurisdicciones, reparto que subsistió hasta la moderna configuración territorial. La fortaleza de A Barreira, que estaba ubicada en Sta. María de Cospeito y presidía el antiguo coto de A Pena, a 487 metros de altitud, fue dominio del citado Ruy López de Aguiar. Ostentaba jurisdicción civil y criminal, contaba con 36 vasallos que pagaban luctuosa y varios “ferrados” de pan de renta, además de contribuir con cuatro “fanegas”y media al Monasterio de las monjas de Lugo. Uno de los más antiguos lugares de los Ribadeneira, la fortaleza fue una de las primeras que se demolió en esta zona por mandato de Fernando de Acuña, gobernador del reino de Galicia, aún se pueden ver vestigios de la misma (fosos y contrafosos) sobre su lugar de emplazamiento.
Para seguir contando la historia del municipio es importante relacionarla con la evolución a lo largo de los tiempos de su rico patrimonio histórico-artístico.
La casa o palacio señorial de A Barreira, en Sta. María de Cospeito, y a medio kilómetro de distancia de donde se levantaba la fortificación descrita, cuenta con la más antigua de los señores de este nombre y poseyó, entre preeminencias y regalías, el patronato in solidum del curato de Sta. María de Cospeito y su anexo San Julián de Sta. Cristina, entre otros dominios y jurisdicciones.
El castillo de Caldaloba, situado en la parroquia de San Martín de Pino, domina el antiguo coto de O Mato desde una pequeña prominencia. En esta fortaleza Fernán Ares y su mujer Constanza, hija del decapitado Pardo de Cela, se hicieron fuertes contra Diego López de Aro, gobernador entonces del reino de Galicia y agente de los Reyes Católicos. Con el fin de sufragar los gastos originados por el cerco de Caldaloba, los Reyes Católicos, mediante carta fechada en Córdoba con fecha 16/08/1484 e dirigida a López de Aro, dispusieron la venta de los bienes de Fernán Ares. En 1646 aparece como propietario del castillo y posesiones del mismo Álvaro Pérez de Vivero, conde de Fuensaldaña y vizconde de Altamira.
En 1699 por escritura otorgada en Mondoñedo, se aforan a Esteban de Outeiro, natural del coto de O Mato, en San Martín de Pino, por tres vidas de Reyes en España y 40 años más y varios bienes de dicho coto, con 16 “fanegas” de monte entorno a la fortaleza, mediante el pago de 6 “fanegas” de centeno y dos de trigo.
El año de 1775, los condes de Fuensaldaña vendían a Gabriel María Montenegro, señor de Caldaloba, las piedras de los restos resultantes de repetidos cercos del castillo para la construcción de una cárcel. Posteriormente (1851) se aforó a la fortaleza, con la finca que la rodeaba y otras tierras, a Luis Vázquez Rúa por la cantidad anual de 320 reales de vellón. En 1858, finalmente, el párroco de la vecina feligresía de Xoibán. Daniel Vázquez Rúa, adquiere la propiedad del castillo y sus posesiones, que cede en virtud de permuta a su hermana Antonia. En la actualidad su propiedad y los 4 fosos defensivos que lo circundan está dividida en 2 partes de titularidad privada.
A medio kilómetro aproximado de la torre descrita se encuentra el palacio señorial de Caldaloba, con una casa y coto fundada por Rodrigo Díaz Sanjurjo y Montenegro (1621) y los dueños del mismo nada tuvieron que ver con la propiedad del castillo. El palacio, probablemente construido en dos épocas, está formado de planta baja y principal; la fachada de la construcción más antigua luce un escudo de armas de un solo cuartel con la M coronada de los Montenegro, y sobre ella, la serpiente(según la leyenda se trata de la serpiente encantada del castillo, a la que Gabriel Antonio Montenegro dió muerte con su espada). La otra parte del edificio muestra un elegante balcón cubierto con balaustrada de piedra granítica. Adosada al mismo se encuentra una capilla barroca, con arco toral de medio punto, fundada en 1685 y mudada posteriormente (1769). La capilla luce en su fachada un escudo partido, ricamente labrado, con la M coronada de los Montenegro y su luna en cuarto creciente, así como 5 estrellas de los luaces. Hasta no hace mucho fueron dueños proindiviso de los bienes y casa de Caldaloba: Juan, Aurora, Sara, Ángeles y Antonio Neira Berbetoros, en calidad de herederos de Juan Neira Gayoso, su padre, hijo a la vez de Ramón Neira Montenegro y de Ramona Gayoso Ulloa. Actualmente (1977) la casa y las propiedades de Caldaloba fueron adquiridas por un particular para la explotación agrícola y ganadera de tan rico lugar, bañado por el riachuelo de Os Reás, que aún mueve algún molino.
En Cospeito también se encuentra el Palacio de Sistallo, uno de los palacios más espectaculares de la provincia, viejo ejemplar de la arquitectura civil, que se encuentra en la parroquia de Sistallo. Fue construido por el arquitecto Salero Meizo por encargo de Fernando Verdes de Montenegro. El impresionante escudo de la fachada son las armas de los Montenegro. Fernando Verdes de Montenegro fue Ministro del Consejo de Indias, secretario de Hacienda (1740), contador mayor de rentas, tesorero general del reino de Valencia, proveedor de los ejércitos del reino e hijo del caballero irlandés O ´Shea. Hoy en día se reformaron sus jardines bajo la supervisión del paisajista Sales Covelo.
En la Edad Media, el coto de A Pena de Cospeito perteneció a Ruy López de Aguiar ( López de A Pena ), osado caballero gallego y sonado trobador de producción desconocida, que llegó a apoderarse del alcázar de Lugo (1461) y a tener 30 jinetes armados bajo sus órdenes. Las restantes tierras del municipio, a lo largo del período histórico considerado, fueron pertenencia casi por entero a los Andrade: solo en la actual feligresía de Santalla de Rioaveso contaban con más de 60 vasallos.
En el siglo XV durante el levantamiento popular de los Irmandiños contra la opresión señorial, las gentes de Cospeito dejaron testigo de su participación en la lucha: La Torre de Támoga, por ejemplo, o su histórico Castillo de Caldaloba o Vilaxoán, conservaron huellas de la destrucción de los insurrectos. En esta última fortaleza una vez restaurada, resistieron Constanza y Fernán Ares de Saavedra, hija y yerno respectivamente del ajusticiado Pardo de Cela. Se trataba del último reducto de la nobleza gallega que opuso resistencia a la uniformadora política de Castilla.
Las tierras del municipio se dividieron posteriormente en cotos y jurisdicciones, reparto que subsistió hasta la moderna configuración territorial. La fortaleza de A Barreira, que estaba ubicada en Sta. María de Cospeito y presidía el antiguo coto de A Pena, a 487 metros de altitud, fue dominio del citado Ruy López de Aguiar. Ostentaba jurisdicción civil y criminal, contaba con 36 vasallos que pagaban luctuosa y varios “ferrados” de pan de renta, además de contribuir con cuatro “fanegas”y media al Monasterio de las monjas de Lugo. Uno de los más antiguos lugares de los Ribadeneira, la fortaleza fue una de las primeras que se demolió en esta zona por mandato de Fernando de Acuña, gobernador del reino de Galicia, aún se pueden ver vestigios de la misma (fosos y contrafosos) sobre su lugar de emplazamiento.
Para seguir contando la historia del municipio es importante relacionarla con la evolución a lo largo de los tiempos de su rico patrimonio histórico-artístico.
La casa o palacio señorial de A Barreira, en Sta. María de Cospeito, y a medio kilómetro de distancia de donde se levantaba la fortificación descrita, cuenta con la más antigua de los señores de este nombre y poseyó, entre preeminencias y regalías, el patronato in solidum del curato de Sta. María de Cospeito y su anexo San Julián de Sta. Cristina, entre otros dominios y jurisdicciones.
El castillo de Caldaloba, situado en la parroquia de San Martín de Pino, domina el antiguo coto de O Mato desde una pequeña prominencia. En esta fortaleza Fernán Ares y su mujer Constanza, hija del decapitado Pardo de Cela, se hicieron fuertes contra Diego López de Aro, gobernador entonces del reino de Galicia y agente de los Reyes Católicos. Con el fin de sufragar los gastos originados por el cerco de Caldaloba, los Reyes Católicos, mediante carta fechada en Córdoba con fecha 16/08/1484 e dirigida a López de Aro, dispusieron la venta de los bienes de Fernán Ares. En 1646 aparece como propietario del castillo y posesiones del mismo Álvaro Pérez de Vivero, conde de Fuensaldaña y vizconde de Altamira.
En 1699 por escritura otorgada en Mondoñedo, se aforan a Esteban de Outeiro, natural del coto de O Mato, en San Martín de Pino, por tres vidas de Reyes en España y 40 años más y varios bienes de dicho coto, con 16 “fanegas” de monte entorno a la fortaleza, mediante el pago de 6 “fanegas” de centeno y dos de trigo.
El año de 1775, los condes de Fuensaldaña vendían a Gabriel María Montenegro, señor de Caldaloba, las piedras de los restos resultantes de repetidos cercos del castillo para la construcción de una cárcel. Posteriormente (1851) se aforó a la fortaleza, con la finca que la rodeaba y otras tierras, a Luis Vázquez Rúa por la cantidad anual de 320 reales de vellón. En 1858, finalmente, el párroco de la vecina feligresía de Xoibán. Daniel Vázquez Rúa, adquiere la propiedad del castillo y sus posesiones, que cede en virtud de permuta a su hermana Antonia. En la actualidad su propiedad y los 4 fosos defensivos que lo circundan está dividida en 2 partes de titularidad privada.
A medio kilómetro aproximado de la torre descrita se encuentra el palacio señorial de Caldaloba, con una casa y coto fundada por Rodrigo Díaz Sanjurjo y Montenegro (1621) y los dueños del mismo nada tuvieron que ver con la propiedad del castillo. El palacio, probablemente construido en dos épocas, está formado de planta baja y principal; la fachada de la construcción más antigua luce un escudo de armas de un solo cuartel con la M coronada de los Montenegro, y sobre ella, la serpiente(según la leyenda se trata de la serpiente encantada del castillo, a la que Gabriel Antonio Montenegro dió muerte con su espada). La otra parte del edificio muestra un elegante balcón cubierto con balaustrada de piedra granítica. Adosada al mismo se encuentra una capilla barroca, con arco toral de medio punto, fundada en 1685 y mudada posteriormente (1769). La capilla luce en su fachada un escudo partido, ricamente labrado, con la M coronada de los Montenegro y su luna en cuarto creciente, así como 5 estrellas de los luaces. Hasta no hace mucho fueron dueños proindiviso de los bienes y casa de Caldaloba: Juan, Aurora, Sara, Ángeles y Antonio Neira Berbetoros, en calidad de herederos de Juan Neira Gayoso, su padre, hijo a la vez de Ramón Neira Montenegro y de Ramona Gayoso Ulloa. Actualmente (1977) la casa y las propiedades de Caldaloba fueron adquiridas por un particular para la explotación agrícola y ganadera de tan rico lugar, bañado por el riachuelo de Os Reás, que aún mueve algún molino.
En Cospeito también se encuentra el Palacio de Sistallo, uno de los palacios más espectaculares de la provincia, viejo ejemplar de la arquitectura civil, que se encuentra en la parroquia de Sistallo. Fue construido por el arquitecto Salero Meizo por encargo de Fernando Verdes de Montenegro. El impresionante escudo de la fachada son las armas de los Montenegro. Fernando Verdes de Montenegro fue Ministro del Consejo de Indias, secretario de Hacienda (1740), contador mayor de rentas, tesorero general del reino de Valencia, proveedor de los ejércitos del reino e hijo del caballero irlandés O ´Shea. Hoy en día se reformaron sus jardines bajo la supervisión del paisajista Sales Covelo.